Los datos indican un aumento de parejas que acuden a un profesional para solucionar algún problema de tipo relacional.

Entre los principales problemas que se consultan figuran; la infidelidad, los celos, la incomunicación, la ausencia de límites en la familia de origen, las dificultades a la hora de alcanzar acuerdos, las diferencias en las pautas educativas, las diferencias en filosofía de vida...

El Dr. Gottman afamado profesor de psicología de la universidad de Washington describe las señales que predicen un divorcio; planteamiento violento, los cuatro jinetes( las críticas, el desprecio, la actitud evasiva, la actitud defensiva ), sentirse abrumado y el lenguaje del cuerpo.

A nivel psicológico la relación de pareja cuando se muestra disfuncional puede constituir una importante fuente de  estrés y displacer.

Ante este panorama, la terapia de pareja nos ofrece estrategias para evitar y afrontar los distintos problemas antes descritos, pero para que ésta sea efectiva es necesario que ambos miembros estén motivados y pongan en marcha las distintas estrategias indicadas por el terapeuta.